Maria Antònia Munar, la expresidenta del Consell de Mallorca, ha ingresado de nuevo esta tarde en la cárcel de Palma después de disfrutar de un permiso penitenciario de seis días. La expresidenta del Consell de Mallorca conoció en libertad la decisión adoptada ayer por la Audiencia, en la que se le reconocía el derecho a recibir el tercer grado penitenciario, lo que le permitirá únicamente acudir a la cárcel a dormir, mientras que el resto del día estará en libertad.

A su entrada esta tarde en el centro donde lleva siete años cumpliendo condena por corrupción no ha querido realizar ningún tipo de declaración, ni valorar tampoco lo que representará para ella el inicio de este nuevo régimen penitenciario.

El tribunal ha concedido el tercer grado en contra del criterio de la Junta de Tratamiento, que se había opuesto a este beneficio penitenciario. Los funcionarios de la cárcel consideraban que existía un nivel medio bajo de que Munar pudiera volviera a cometer otro delito, además de la circunstancia de que todavía le quedaban más de seis años de cárcel por cumplir.

La principal circunstancia que ha motivado que los jueces le otorguen el tercer grado es que el pasado mes de septiembre Maria Antònia Munar indemnizó con medio millón de euros al Consell de Mallorca. Este dinero lo entregó para recompensar el daño económico que sufrió la institución como consecuencia del caso Can Domenge. Por esta razón, incluso la fiscalía se sumó al recurso que planteó la defensa, que solicitó al tribunal que se le aplicara de inmediato este régimen de semilibertad para su defendida, después de pasar tanto tiempo privada de libertad.