Hay un jardín de agua y sombras en el centro de Palma donde parar y restablecer el vínculo perdido con nosotros mismos. En la calle Costa i Llobera 20, a unos metros de El Corte Inglés de Avingudes, la marca Hammam Al Ándalus regenta desde el pasado agosto un lugar de salud y relajación donde tanto los visitantes como los residentes de la isla pueden encontrar su rincón preferido para el descanso.
Hammam Al Ándalus presenta esta oferta de turismo y salud en plena crisis sanitaria, apostando por mantener e incrementar los puestos de trabajo, proponiendo un producto especial y diferente, cultural, enraizado en nuestra historia, respetuoso con el medio ambiente y destinado a mejorar nuestro estado físico y mental.
Como en el resto de ciudades en las que está presente, la marca llega a Mallorca para enriquecer una ya magnífica oferta turística y de salud. Lo hace a través de una propuesta de valor asentada en tres pilares: la salud física del cuerpo, el equilibrio emocional y también la preocupación por la sostenibilidad del planeta conseguida a través de una audaz reinterpretación del turismo y la salud, con base en la ciencia, el arte y la tecnología.
A través del agua y los sentidos como hilo conductor, Hammam Al Ándalus propone un relato que acerca al visitante al contacto con su propia naturaleza y también con la exterior. El hammam se considera de antiguo como una importación de esa naturaleza en el interior de las ciudades. Palma tiene ya ese espacio que ofrece inspiración y salud tanto para el viajero como para el propio residente.
En este recogido e íntimo baño podrán también encontrar una interesante carta de experiencias basadas en el baño árabe, los masajes relajantes y los kessa tradicionales con agua y espuma de jabón sobre camas de piedra caliente. También dispone de servicios estacionales que van cambiando como cambia la naturaleza, de estación en estación, para sorpresa y deleite de los visitantes que disfrutan también de simbolismo, cultura, salud y conexión con la naturaleza.
