El mundo del motor balear confía en la consecución del Mundial de Joan Mir en MotoGP, así lo reconocieron ayer a DIARIO de MALLORCA alguna de sus caras más visibles. Todos ellos coincidieron en la capacidad que tiene el piloto de Suzuki para «aguantar la presión» en estas últimas carreras, aunque difieren a la hora de reconocer si «es momento de ser conformista o arriesgar» en los cuatro Grandes Premios que restan para el final del campeonato.
«Lo más importante es que no se tiene que volver loco por querer ganar una carrera porque lo que está en juego es el Mundial. Es verdad que ganarlo sin imponerse en un Gran Premio quizás parezca que no es lo mismo, pero el título es lo que realmente cuenta», valora Augusto Fernández, piloto mallorquín en la parrilla de Moto2. «Creo que ser conformista es mejor opción para él. Tiene que seguir haciendo lo que hace, ser constante le está llevando a conseguir más puntos que el resto de los pilotos», asegura por su parte David Salom, excampeón del mundo de SBK. «Cualquier persona que esté sentada en el sofá de su casa viendo el Mundial dirá que es momento de ser conformista, pero yo entiendo también la necesidad que tiene Mir de ganar su primera carrera en MotoGP. Joan no es conformista, Joan es un luchador nato y quiere ganar. Joan es de arriesgar y de jugársela», difiere Pedro Mas, expresidente de la Federación Balear de Motociclismo (FBM).
«En lo que se tiene que centrar es en sacar lo mejor de sí mismo. Entender que es un serio aspirante al título y que es una oportunidad que no es fácil que se te presente. Tiene calidad suficiente para eso», concreta por su parte Chicho Lorenzo, padre del excampeón del mundo de MotoGP Jorge Lorenzo. «Él lo que tiene que hacer es ganar una carrera, eso es lo más importante. Eso le dará mucha más tranquilidad. A partir de ahí ya solo tendrá que hacer números. Tienen carrera casi cada fin de semana y tiene ritmo suficiente para competir», señala Rafael Cañellas, actual presidente de la FBM.
Todos ellos aseguran que la presión no tiene por qué afectar al piloto de 23 años en este tramo final del campeonato. «Ya ha sido campeón del mundo en Moto3, con eso tenemos ganado algo muy importante. Mir ya tuvo que luchar en su momento contra la presión y, visto lo visto, lo hizo muy bien. No es un aspecto que me preocupe para nada», analiza Chicho. «Es una categoría nueva para él, pero creo que lo sabrá llevar bastante bien. Al final los que tienen que arriesgar son el resto. Él simplemente tiene que mantener su ritmo», valora Salom. «Para gestionar la presión le va a ayudar mucho el hecho de que haya tantas carreras seguidas. Si tienes que competir en un solo Gran Premio al mes, hay demasiado tiempo para que la gente te apriete, pero de esta manera terminas el domingo y el miércoles ya estás montado en la moto concentrado para la siguiente», aprecia por su parte Cañellas.
Con 100 puntos todavía en juego, el piloto palmesano de la categoría reina lidera el Mundial con seis de diferencia sobre su máximo perseguidor, el francés Quartararo. « La verdad es que le veo muy bien, siempre gestionando muy bien las carreras, incluso en las que hay dificultades como en Le Mans. Le veo muy fuerte y con muchas posibilidades de llevárselo», apunta Augusto. «Tiene que vigilar a todos los que están cerca. Hasta el cuarto piloto de la general hay que vigilarlos a todos. Al final una caída te puede bajar a la cuarta o la quinta posición de la clasificación», admite Mas, quien remarca las «muchísimas posibilidades» que tiene Mir de ser el campeón del Mundial. «Creo que más o menos se mueve en un 70%. Incluso sin ganar ninguna carrera puede serlo, lo que pasa es que él daría ahora mismo la vida por ganar un Gran Premio. Lo lleva entre ceja y ceja», resume.
Augusto decidirá la semana que viene si pasa por quirófano
No está siendo una temporada nada fácil para el mallorquín de Moto2 Augusto Fernández, quien la semana que viene decidirá si pasa por quirófano para solucionar el síndrome compartimental que afecta a su antebrazo derecho. «Está haciendo un esfuerzo sobrehumano para acabar las carreras, porque en las últimas vueltas tiene mucho dolor», reconoció a este diario su preparador físico Marc Horrach.
