Numerosos aficionados del Atlético Baleares no ocultaron ayer su descontento con la organización que planificó el club a la hora de colocar a sus abonados en las gradas durante el partido que afrontó el conjunto blanquiazul frente al Internacional de Madrid. Las quejas se produjeron debido a que varios socios vieron cómo su asiento, ubicado en la zona preferente de la grada, ya estaba ocupado por diversos compromisos del club. «Pagar 130 euros por mi carné de socio sin saber si voy a ir y cuando voy resulta que mi silla pertenece al palco presidencial y sientan a otro. Tuve que buscarme la vida y ver el partido en pleno sol… Para mí es una vergüenza, espero que el club pida disculpas y se organice mejor para los próximos partidos», reclamaba a través de las redes sociales un socio del club. «En el primer partido ha habido descoordinación de la empresa de seguridad, pero también ignorancia y falta de colaboración con los asistentes. Si el problema no se soluciona, pues los partidos a puerta cerrada y a seguir al equipo desde casa por televisión», aseguraba por su parte Rafel Pericàs, otro abonado blanquiazul.

El club presidido por Ingo Volckmann justificó ayer las incidencias: «El club sí trabajó en poder colocar a los socios en la zona más cercana y real de su abono. Si bien, en el caso de la zona preferente, el club va a tratar en el próximo partido de que los abonados de ese sector vean respetada su ubicación más adecuadamente, ya que ayer, algunos de ellos tuvieron que ver el partido en los fondos y han comunicado al club sus molestias. También intentará aumentar la señalización». A pesar de tomar nota e intentar mejorar esta faceta, el club desea recordar que «estamos ante una pandemia, donde muchos aficionados de otros equipos, deportes o espectáculos, no pueden ver presencialmente el acontecimiento». Por eso, sabiendo que para el equipo es vital la asistencia de 1.000 personas para sentirse arropado ante el rival, recuerda que «es básico que todos los socios cumplan al 100% las normas, para no dar pasos en falso».